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| Índice de La alimentación ideal |
Capítulo 12
«El proceso de pensar desde abajo» y «el proceso de pensar desde arriba»
Para poder demostrar las relaciones reales que existen entre el hombre de la Tierra y el alimento animal y vegetal es necesario conducir al lector a través de ciertos análisis cósmicos u ocultos.
Éstos quizá podrán parecerle complicados al investigador no entrenado, pero para aquel que realmente tenga energía e interés para reflexionar sobre ellos, serán una prueba irrefutable de que este libro está totalmente de acuerdo con los hechos absolutos.
Es por ello que mi tarea no es la de presentar las citadas fuentes de alimentación en forma de análisis químicos, o con los conceptos de uso corriente como «vitaminas», «calorías», «ácidos», etc; para la propagación de esta forma de conocimiento, la humanidad tiene toda una multitud de científicos competentes. Mi misión tampoco es, naturalmente, escribir una serie de nuevos libros de cocina vegetarianos; el mundo comienza a estar bien surtido de libros de este tipo. Sin embargo, mientras la investigación de la ciencia moderna – del mismo modo que los libros de cocina – se basa en un «proceso de pensar desde abajo» o es el resultado de éste; las informaciones que me ha tocado comunicar son el resultado de un «proceso de pensar desde arriba» y expresan el supremo análisis oculto de las dos fuentes de energía citadas, lo que equivale a decir que se trata de los análisis de la misma vida que vive en ellas. Como «proceso de pensar desde arriba», se entiende la percepción suprema, o experiencia por medio del «espíritu santo», en la cual todo se observa desde «la vida»; mientras que «el proceso de pensar desde abajo» sólo supone una experiencia por medio de los rudos sentidos físicos en la que todas las cosas solamente son consideradas desde «la materia». La ciencia moderna se basa, por el momento, en esta última forma de percepción, pero más adelante será llevada por la evolución a poder contemplar las cosas desde «la vida», y de este modo se remontará sobre la gran cantidad de ilusiones y trampas que la percepción desde «la materia» supone. A continuación voy a demostrar las cosas desde «la vida» y, de este modo, dar el fundamento inconmovible sobre el que la ciencia de la alimentación y los libros de cocina deberían basarse. |
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