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| Índice de Exequias |
82. CAPÍTULO No hay nada que desmienta que la tierra, el sol y las vías lácteas sean seres vivos Ahora a través de este libro hemos obtenido un gran conocimiento del análisis de nuestro propio organismo y hemos visto que la imagen de nosotros mismos en forma de microcosmos y macrocosmos dentro de nuestro propio organismo en realidad es una imagen del universo y que nuestro propio análisis por lo tanto es idéntico a la revelación del misterio de la vida, es un reflejo especular de la inmensidad en soberanía de los seres vivos, y que la sustancia es pro forma, mientras que la vida es el «punto fijo» tododominante, detrás de cualquier tamaño, vibración, sonido y color.Nuestra propia identidad como macrocosmos para el micromundo en nuestro propio organismo ¿no es lo mismo que lo que son las poderosas «fuerzas naturales» para nosotros? ¿No somos nosotros microindividuos frente a los gigantescos centros de energía que desencadenan fuerzas, tales como el globo terrestre, el sol y la vía láctea? – ¿Qué significa la manifestación total o la liberación de fuerza de cada hombre o cada animal en relación a estos inmensos centros? – Estos centros principales ¿no son «organismos», no expresan seres gigantes, no son expresiones de «macroindividuos» para nosotros? – De hecho, no existe nada en absoluto que pueda negar la pregunta. En todos los detalles, la imagen de estos centros de energía encaja a nuestro propio organismo. Cualquier negación de esto se convierte en una expresión impotente de lo opuesto a la lógica. |
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