Lee y busca en El Tercer Testamento
   Cap.:  
(1-204) 
 
Búsqueda avanzada
Índice de Exequias   

 

 

28. CAPÍTULO

A través de la materia o por qué el investigador o científico materialista no puede descifrar el sentido de la vida

Cuando arriba hemos referido a los resultados de la ciencia materialista como un rayo de luz que va «a través de la materia», señalamos que el rumbo de la investigación expresada por estos resultados difiere de otro rumbo de investigación cuyo rayo de luz sólo puede expresarse como «yendo a lo largo de la materia».
      Para entender esto, uno debe comparar la materia misma, que es el objeto de toda investigación, y mediante la cual se manifiesta toda información, con un cuerpo que tiene un cierto ancho pero que es infinitamente larga. El ancho de este cuerpo se extiende desde la nebulosa del microcosmos hasta la nebulosa del macrocosmos, de vía láctea a longitud de onda. Y es este tramo que la ciencia terrena a través de su investigación ha recorrido, y en cuyos límites externos ahora se comienza a detener. Dado que la materia en esta dirección mencionada «a través» finalmente se borra en una clase de «nada», toda investigación tiene que terminar aquí por sí misma. Pero antes de que el investigador haya alcanzado el límite, se ha enriquecido con el conocimiento del valor material de la vida. Él es un experto en todo el conocimiento expresado a través de medidas, peso y velocidad. Pero no es un experto en el conocimiento sobre el origen de estos factores. Él no está muy bien informado sobre lo «vivo» mismo o el elemento que crea y dirige estos factores, ya que esta forma de conocimiento no se puede ver en absoluto a través de medidas o grados de velocidad. Todavía no sabe que cualquier tipo de medida, cualquier tipo de peso, cualquier forma de movimiento o velocidad, tanto fuera en la naturaleza, en el universo, como en su propio organismo y conciencia, sólo puede ser una expresión de – voluntad y, por lo tanto, de espíritu y pensamiento. Él ve todo en «números» y «letras» pero todavía no puede «leer» «palabras» u «oraciones» y, por lo tanto, no puede llegar al conocimiento expresado por estas «palabras» y «oraciones». Tiene «el libro», conoce su medida, peso y todos sus detalles externos, pero no puede adquirir más conocimiento hasta que «aprenda a leer», hasta que pueda interpretar las «diferentes combinaciones de letras» del «libro». Este «libro» es lo mismo que la vida diaria en su totalidad. «Las letras» son las experiencias diarias individuales. El científico terreno sólo puede interpretarlas en «números» y «letras», es decir, en medida y peso, pero no en «palabras» y «oraciones», lo cual en este caso quiere decir «análisis cósmicos». Pero cuando sólo puede descifrar la vida cotidiana en «números» y «letras», no en «palabras» y «oraciones», no puede descifrar su significado y propósito.
 
El signo de la cruz
EL SIGNO DE LA CRUZ
El campo luminoso de la izquierda expresa la nebulosa del microcosmos, mientras que el campo luminoso de la derecha expresa la nebulosa del macrocosmos. Entre estos dos campos, una línea de puntos conduce a través del campo oscuro, que expresa la materia. Esta línea expresa la dirección de investigación actual de la ciencia terrena, que va «a través de» la materia. La otra línea punteada que va hacia arriba «a lo largo» de la materia, expresa la dirección que gana la misma ciencia en el cambio de rumbo al que se hace referencia en este libro. Por lo tanto, estas dos direcciones de investigación, las cuales ambas son necesarias para expresar el legítimo «espíritu santo», existen como el momento desencadenante más profundo para el surgimiento del «signo de la cruz».


Comentarios pueden mandarse al Martinus-Institut.
Información de errores y faltas y problemas técnicos puede mandarse a webmaster.