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113. CAPÍTULO

Es necesario ser cauteloso con juzgar algo como «fantasía»

Ahora, tal vez haya lectores que sonríen de lo anterior y posiblemente piensen que he llegado demasiado lejos y mi análisis es pura fantasía. Pero esto sólo enfatiza la falta de conciencia de los mismos seres, su falta de sentido de la lógica real, la matemática más alta de la existencia.
      Pero, por cierto, ¿qué es la fantasía? – Si un error se ha convertido en una tradición de miles de años y se percibe como una realidad entre los hombres, entonces la revelación de la verdadera realidad para las mismas personas será percibida como «fantasía». Pero si la verdad ya es una tradición, la equivocación se percibirá como «fantasía». Lo llamado fantástico no es necesariamente irreal, al igual que lo irreal no se tiene que percibir como fantástico. Si algo se percibe como fantástico, depende de cómo es de antemano la actitud de la persona. Uno debe tener cuidado con la evaluación: «fantasía». Una equivocación o un error pueden, para el hombre sujeto a la «sugestión divina» (ver Livets Bog, apdo. 140) a veces ser percibido como la realidad total, así como una realidad total o hecho en otros momentos puede ser percibido como irrealidad total por la misma persona.


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