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| Véase el símbolo nº 36 en nueva ventana | Índice de La Imagen Eterna del Universo, volumen 4 |
Símbolo n° 36 La estructura de la vida eterna La estructura de la vida eterna 36.1 Cómo surgen el espacio y el tiempo Como ya sabemos, el ser vivo existe eternamente. No ha tenido ningún comienzo y jamás dejará de existir. Su yo y los principios primarios de su supraconciencia son realidades eternas e inalterables, del mismo modo que el proceso de creación y experimentación producido por ellas también es un fenómeno eterno que nunca cesa. El resultado de este proceso creador es la creación y la experimentación de vida. A través de este proceso eterno de creación y experimentación se forman los órganos y cuerpos psíquicos y físicos de los seres vivos. Pero por medio de dicho proceso creador no pueden crearse de ningún modo objetos eternos. Todos los objetos creados no pueden formarse sin estar sujetos a un comienzo y un final. Y como la materia de la que están formados está sometida a una transformación, ya que la materia no puede existir sin ser movimiento de un tipo u otro, lo cual es a su vez lo mismo que transformación, un objeto creado no puede conservar su forma o estructura. Dicha forma se descompondrá inevitablemente y la cosa creada tendrá, por consiguiente, un fin, del mismo modo que tuvo un comienzo. Cesará inevitablemente, pero de este modo surge lo que llamamos "espacio" y "tiempo". |
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Síntesis