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| Véase el símbolo nº 23 en nueva ventana | Índice de La Imagen Eterna del Universo, volumen 2 |
Símbolo n° 23 El hombre acabado a imagen y semejanza de Dios 23.1 De mineral a hombre En lo que precede hemos llegado al estadio del hombre acabado, es decir, al estadio o reino del que Cristo dice: "Mi reino no es de este mundo". Como ya sabemos, este reino todavía no existe en la Tierra. Sólo existe en globos con un estándar evolutivo superior y con una humanidad, así mismo, más evolucionada que la humanidad del globo terrestre. Estos seres están tan altamente evolucionados que en ellos encontramos el resultado final por lo que respecta a la creacion del hombre por la Divinidad a su imagen. Un ser que se encuentra aquí ha atravesado todos los estadios evolutivos. En su actual ciclo de espiral cósmico comenzó bajo la forma de vida mineral y vegetal. Desde aquí pasó a la forma de vida animal culminando en ella como hombre diabólico o como ser de la oscuridad o del principio mortífero. Se convirtió en el origen de la guerra y de los destinos desgraciados. Los resultados de ello se convirtieron en su cataclismo, en su experimentación de la culminación del dolor y del sufrimiento. Con el desarrollo de esta incipiente facultad humana comenzó a vibrar de acuerdo con el tono fundamental del universo, el amor. Con esta facultad comenzó una época nueva de su paso por el ciclo de espiral. Con la ayuda de la redención del mundo comenzó a dominar la naturaleza animal que aún le quedaba por vencer. |
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Síntesis