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Símbolo nº 4
El camino hacia la luz
4.1  El organismo físico es sólo un instrumento perecedero por medio del cual se manifiesta un origen eterno y espiritual
Tal como más adelante explicaremos, todos los seres vivos constituyen un principio trino, que a su vez constituye un yo y una supraconciencia a la que la subconciencia del yo está vinculada. Esta estructura constituye el auténtico "Algo" eterno que se manifiesta por medio de su organismo físico. Este organismo no forma parte del ser originario sino que es solamente un instrumento construido o creado de un modo provisional para que éste se manifieste físicamente, cree y haga experiencias. Por el hecho de haber sido creado, este instrumento es, al igual que todas las otras realidades creadas, perecedero, se desgasta, se hace inservible y su origen espiritual debe liberarse de este utensilio o cuerpo inútil. El proceso por el que este ser se libera de dicho instrumento es lo que conocemos bajo el nombre de "muerte". Sin embargo, esta muerte no es auténtica sino un dispositivo divino de la gran estructura cósmica del universo. El origen espiritual de este instrumento sigue viviendo y puede nacer otra vez en un nuevo organismo físico.


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