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| Por qué el presente análisis de los polos se describe aquí | 2621. Es comprensible que hombres que actualmente están en un periodo de fuerte enamoramiento, o se encuentran en la espléndida luna de miel del matrimonio no vean con especial simpatía o interés los presentes análisis del amor verdadero y absoluto, dado que la luz en la que viven ilumina todo lo que el conjunto de sus sentidos puede producir de voluptuosidad y disfrute de la vida en este momento. Pero, estos análisis no son en absoluto para estos seres. Tienen, simplemente, que dejarlos estar. Nadie, para quien el matrimonio todavía es, en gran medida, santo, y disfruta de una luna de miel a lo largo de toda la vida, tiene ninguna razón en absoluto para angustiarse. Mientras los seres estén orgánicamente dispuestos de modo que el matrimonio todavía es una condición de vida y soporta la luz de su vida, habrá acceso al matrimonio en un futuro lejano. Así que los seres enamorados o hambrientos de matrimonio no deben sentir, en absoluto, ni angustia ni antipatía hacia la degeneración y disolución del matrimonio, ni contra los hombres que, en mayor o menor grado, han salido de la zona del matrimonio, y en quienes los síntomas del verdadero amor universal se muestran de una forma más o menos pura. Pero, como hay un tanto por ciento relativamente grande de hombres que no saben qué hacer con sus propios problemas matrimoniales, sus problemas con respecto a su sexo o sexuales, nos vemos precisados a presentar tan claramente los presentes análisis. En caso contrario, traicionaríamos nuestra misión y abandonaríamos a estos hombres a un engaño mental que tendría absolutamente que terminar en una multitud de desviaciones. Y es para estos hombres que se han manifestado dichos análisis, y no para los que aún se encuentran en matrimonios felices. Documentar las explicaciones cósmicas de Cristo y justificar su misión y, así, ayudar a liberar sus amadas y divinas explicaciones de toda la superstición y malentendidos, que hoy se practican en su nombre, es nuestra tarea. |
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