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Cuando el talento del ser para el matrimonio ha degenerado  2560. Pero, quién es el culpable en una situación así. Es cierto que un cónyuge que no cumple la promesa dada a su cónyuge y eventuales hijos de este matrimonio y se casa de nuevo, ha traicionado su compromiso matrimonial. Pero, ¿por qué él o ella ha hecho esto? Cuando el ser en cuestión ha podido abandonar a su esposa e hijos simplemente para poder tener una convivencia sexual o un acto de apareamiento con otra pareja sexual de sexo contrario, y cree que ésta será la pareja matrimonial verdadera, esto es por lo general un signo de que, como ya se ha dicho, el talento para el matrimonio del ser en cuestión ya está muy degenerado. El verdadero sentimiento matrimonial, con el consiguiente amor a la descendencia, ya no es nada de importancia primaria en su psique o conciencia. La hormonización o refuerzo artificial del sentimiento de apareamiento del ser y del amor a la descendencia, que conocemos como «enamoramiento», ya no tiene una fuerza tal que pueda proteger el interés matrimonial primario del ser y la simpatía hacia el mismo cónyuge toda una vida terrena hasta su final.


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