Lee y busca en El Tercer Testamento
   Apdo.:  
(2396-2664,E) 
 
Búsqueda avanzada
   

 

Lo que se requiere para experimentar la ciencia del espíritu como hecho, y por qué a veces es ignorada como fantasía, especulación o mito  2535. La diferencia entre estas dos ciencias es que mientras la ciencia material puede comprenderse y aceptarse con la inteligencia, y así convertirse en hecho real, la ciencia del espíritu no puede en absoluto aceptarse con la sola inteligencia, aunque dicha facultad de la conciencia constituye, naturalmente, un factor de gran ayuda. Aquí tiene que haber, en primer lugar, una facultad del humanitarismo o amor muy altamente desarrollada y después la facultad de la intuición, imprescindible para la percepción cósmica. Cuando uno tiene desarrollada la alta facultad del amor y la consiguiente intuición que la acompaña, puede experimentar cosas por sí mismo como hecho absoluto, aunque no esté en condición de explicarlas y convertirlas en hechos para otros, tal como es el caso con la ciencia material. La experiencia de la ciencia del espíritu como hecho es, por consiguiente, en gran medida una función automática. Es un regalo espiritual o psíquico que, como una fuerza mental, cubre con su sombra la conciencia del ser, mientras la ciencia material sólo es, al contrario, un resultado de investigación, experimentación y observación dirigida por la voluntad. Por lo tanto, se comprende que muy destacados científicos, que son capacidades en la investigación y el conocimiento material, a veces ignoren la ciencia del espíritu como fantasía, como especulación y mito.


Comentarios pueden mandarse al Martinus-Institut.
Información de errores y faltas y problemas técnicos puede mandarse a webmaster.