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El estado humano de los hombres se basa en su divergencia de la psique del animal  2526. Lo que transforma a este animal anterior en hombre no son estos atributos oscuros mencionados, al contrario. Lo que hace del animal un hombre es, precisamente, el intelectualismo y el amor. Cuanto más tiene el ser de estos atributos, más diverge del estado o psique animal. Y es en esta divergencia que se basa todo su estado humano. Pero este estado como «animal» y «hombre» no es un acto de voluntad, dado que son estos dos estados los que dictan la voluntad y, de esta manera, son los que la ponen en escena. Donde lo animal del ser dicta la voluntad, sus actos son «animales» y donde lo humano del ser dicta la voluntad, sus actos o manifestaciones son «humanos». Como toda la humanidad terrena está formada por seres inacabados, es decir, seres que en parte contienen psique «animal» y en parte «psique humana», no es extraño que esta humanidad dentro del ámbito de su vida manifieste guerra, asesinatos y mutilaciones y, simultáneamente, practique religión, humanitarismo y ayuda. Si dar lugar a los atributos humanos sólo fuera un acto de voluntad, habría mucha más paz en el mundo, porque muchos hombres querrían, en realidad, ser mucho más humanos de lo que son, es decir, que desean verdaderamente hacer mucho más bien del que hacen. Les pasa como a S. Pablo: No hacen el bien que quieren, sino que hacen el mal que no quieren.


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