Lee y busca en El Tercer Testamento
   Apdo.:  
(2396-2664,E) 
 
Búsqueda avanzada
   

 

Los hombres con madurez para los análisis cósmicos  2524. Aunque el ser haya comenzado a convertirse en un ser humano, no puede inmediatamente por sí mismo adquirir conocimiento o información cósmica sobre hasta qué punto su actitud y manera de ser humana está en verdadero contacto lógico o científico con la intención cósmica de la vida. Y entonces sucede que se vuelve receptivo para la ciencia del espíritu o análisis cósmicos de la vida. Y son estos hombres, alrededor de todo el mundo, a los que podemos ayudar, por medio de esta obra, con los análisis cósmicos y darles los análisis cósmicos de la imagen de universo de una forma adaptada a su inteligencia. Estos hombres receptivos pueden recibir con su inteligencia una interpretación intelectual de los verdaderos análisis cósmicos de la vida y, con ello, análisis eternos. Así, pueden tener la experimentación teórica del sentido de la vida o solución del misterio de la vida, tal como Dios la revela a través de la estructura del universo. Así, poco a poco, van siendo receptivos, tanto en su conciencia como en su manera de ser, para «destellos cósmicos» para, finalmente, experimentar la conciencia cósmica total como una estructura mental permanente en la que son uno con la Divinidad, el infinito y la eternidad. La salvación de la humanidad o el camino para salir de la oscuridad del día de juicio final y entrar en la esfera luminosa del humanitarismo o amor es investigación y enseñanza cósmica, y la consiguiente manera amorosa de ser. Este es el fundamento básico de la nueva época mundial. Esta época de la cultura de la ciencia del espíritu o sabiduría eterna es la época final del hombre terreno. En esta época cesa la reencarnación del ser. Ya no tiene nada más que aprender en la zona de existencia física. De aquí se convierte en residente en las esferas sobrenaturales o espirituales. Ahora constituye un ser totalmente de luz o el hombre absolutamente acabado a imagen y semejanza de Dios.


Comentarios pueden mandarse al Martinus-Institut.
Información de errores y faltas y problemas técnicos puede mandarse a webmaster.