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| Si todos los hombres hubieran llegado a poder perdonar completamente a su prójimo, toda la guerra, toda la venganza y todo el castigo serían imposibles en la Tierra | 2449. Hasta que los hombres no comprendan que es imposible que su destino sea alcanzado por algo de lo que ellos mismos no son el origen absoluto, y que son ellos y únicamente ellos quienes lo han puesto en marcha, y que ningún otro ser puede, por lo tanto, tener ninguna culpa de esto, no estarán en condiciones de comprender que hoy toda la humanidad vive con una concepción moral al cien por cien falsa donde venga, castiga y hace la guerra. Esta manera de ser constituye un especial y gran océano de creación de nuevas causas de destino oscuro, guerra, sufrimientos y desdichas. Si los hombres hubieran llegado a poder perdonar a su prójimo, no sólo siete veces al día, sino hasta setenta veces siete veces al día, lo cual quiere decir el cumplimiento del mayor mandamiento de la vida: Amarás a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo, toda la guerra, la venganza y el castigo, toda la falta de honradez y todo el engaño y cualquier forma de vivir bien a costa de su prójimo sería imposible en la Tierra. Perdonarle al prójimo cualquier daño que pueda habernos hecho es, así, el cumplimiento correcto al cien por cien de la ley de la vida. Este perdón es, por lo tanto, el camino a la luz, la felicidad y la bienaventuranza. |
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