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Los organismos de los seres vivos se encuentran dentro de organismos, y cada ser constituye simultáneamente un macroser, un microser y un ser mesocósmico 7. Que estos organismos de los seres vivos que existen en el organismo de la Divinidad (universo) se encuentran, de esta manera, los unos dentro de los otros. Cada organismo crea un universo, morada o espacio vital para los microseres de los que los organismos están formados. Para estos microseres, el origen de este organismo es, de esta manera, un macroser que es lo mismo que un ser-universo. El organismo de cada ser físico vivo es, así pues, un universo para seres vivos. Un organismo así da, por consiguiente, posibilidades de vida a seres vivos, además de ser un instrumento de manifestación y experimentación para su origen y constituir conjuntamente con éste un ser vivo. Pero, además de ser un ser vivo y ser, así mismo, origen de un universo, se encuentra él mismo dentro de un organismo del que su organismo constituye un microorganismo, y él mismo en unión con él un microser. Sin esta organización de la aparición de los seres vivos en el universo como seres dentro de seres, toda vida, toda experiencia de manifestación y creación sería algo totalmente imposible.


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