Lee y busca en El Tercer Testamento
   Apdo.:  
(1939-2395) 
 
Búsqueda avanzada
   

 

Fenómenos exteriores por medio de los cuales la Divinidad se convierte en un hecho para el investigador evolucionado  2357. La Divinidad sólo puede convertirse en una experiencia con conciencia diurna despierta y, con ello, en un hecho, a través del estado de conciencia mencionado. Pero, para todos los seres que aún no han alcanzado este estadio evolutivo, la Divinidad forma parte del estado mental que llamamos «místico». Pero, también sabemos por análisis anteriores que todos los seres vivos tienen integrado en ellos un automatismo orgánico que lleva al animal a gritar cuando se encuentra en peligro inminente de muerte, al igual que el mimo automatismo, fomentado en virtud de la zona del instinto del ser, lleva a todos los hombres primitivos a sentir que hay un dios o dioses. La presencia de esta sensación de tipo instintivo en la conciencia de estos hombres primitivos no es en absoluto un producto de una invención humana, sino que es, al contrario, una realidad orgánicamente integrada, que es igual de eterna e inalterable que la propia identidad del ser como un principio trino. La Divinidad es, así, una realidad, un algo que, poco a poco, se convierte en un hecho para cada ser vivo, al igual que todos los demás grandes principios de la vida en las manifestaciones del universo. Del mismo modo que la luz ha creado los ojos o la facultad de ver de los seres, y el sonido ha creado el oído o la facultad de oír de los seres, la realidad de la existencia que constituye la Divinidad eterna también ha creado una facultad orgánica en los seres vivos en virtud de la cual pueden, finalmente, experimentar la Divinidad con conciencia diurna despierta. En realidad, es la presencia de la Divinidad lo que se experimenta como los incipientes «destellos cósmicos», por medio de los cuales el ser adquiere conciencia diurna despierta de su inmortalidad y reencarnación y, con ello, de la solución del misterio de la vida o del destino, y con lo cual se experimenta a sí mismo como el absoluto señor y origen de su propio destino.


Comentarios pueden mandarse al Martinus-Institut.
Información de errores y faltas y problemas técnicos puede mandarse a webmaster.