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| Cuando la naturaleza animal del hombre es combatida, existe el reino de los cielos en la Tierra | 2264. Aquí hemos llegado al núcleo conflictivo de la situación mundial. La actual oscuridad mental, o día de juicio, del mundo es una situación muy natural. Es desencadenada por el lado inacabado de la estructura mental de los hombres, es decir, el lado de los hombres que todavía aparece como mentalidad animal, la naturaleza que es un resto de cuando el hombre era animal en su forma más pura. Esta naturaleza es, en realidad, la única y absoluta causa del presunto mal en el mundo. Es esta naturaleza la que, por consiguiente, hace del hombre su propio y único enemigo. Es la única causa absoluta, no sólo de las guerras entre pueblos, entre naciones y razas y de la guerra entre hombre y hombre y, así mismo, de matanzas y asesinatos de animales, sino que también es la fuente fundamental de todas las enfermedades existentes. Cuando esta naturaleza es combatida en cada hombre concreto y, por consiguiente, ya no se encuentra en los pueblos, en las naciones y razas y, de esta manera, ya no se deja sentir en la vida cotidiana de los hombres, entonces ya no hay más gritos de muerte ni tormentos. Entonces ya no hay más necesidad de hospitales ni de sanatorios para los padecimientos nerviosos, de la misma manera que el castigo y las cárceles, las envidias profesionales, el lucro a costa de otros y el culto al dinero hace tiempo que han pasado a la historia como barbarie y primitivismo del pasado. En esta época mundial futura tampoco hay necesidad de movimientos que hacen propaganda por la paz y el humanitarismo, ya que la mentalidad y modo de ser de la humanidad se ha convertido en idéntica a la verdadera paz mundial, que todo lo conquista, la paz que para el hombre de hoy sobrepasa, por decirlo de algún modo, todo entendimiento, pero de la que tiene hambre y cada día descubre cada vez más que no puede seguir viviendo sin ella. La sabiduría y el amor universales superarán, así, la época de sufrimientos y muerte del día de juicio o cataclismo. El modo de ser de los hombres será el reino de los cielos en la zona física de la Tierra. |
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