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| La cultura mundial moderna está caracterizada por muchas formas de uso indebido o excesivo de la inteligencia | 2216. En lo que antecede hemos visto cómo la inteligencia era un instrumento del instinto de conservación animal o era dictada por este instinto que se basa en la culminación del propio interés o egoísmo. Vimos que esta dictadura tras la facultad de la inteligencia llevaba, efectivamente, a los hombres a un cataclismo, pero también los hacia avanzar, hasta un cierto grado, a ser semejantes a Dios en creación genial y saber y capacidad materialista. Vimos como con la facultad de la inteligencia los hombres podían ampliar las manifestaciones del instinto de conservación y estaban en condiciones de respaldarlas con armas mortíferas, que pueden liberar millones de caballos de fuerza del inmenso dominio de fuerza de la propia naturaleza. Pero no se convirtieron solamente en geniales en asesinar y matar. También estuvieron en condiciones de crear otras manifestaciones geniales, por medio de las cuales los apetitos y deseos del propio interés o egoísmo podían respaldarse y satisfacerse. Máquinas, aparatos y otros descubrimientos, con los que se podían obtener grandes ganancias, fueron producidos, sin tener en cuenta cuántas personas, con ello, estaban privadas de trabajo y sin subsistencia debido a que el trabajo podía ser realizado por las máquinas. Los propietarios de tales bienes técnicos: máquinas y aparatos, podían, por lo tanto, enriquecerse ahora con el capital que antes tenían que pagar para hacer el trabajo a los trabajadores despedidos, debido a la aparición de las máquinas, o sea, el capital que estos trabajadores necesariamente debían recibir para vivir. Por medio de la inteligencia, el más inteligente puede despojar al menos inteligente de lo que tiene de un modo tan genial que directamente se considera legal y natural. De hecho, hay directamente leyes que protegen transgresiones así, porque aún no se está en condiciones de comprender mentalmente que estas formas de manifestación son una transgresión de las leyes cósmicas para el hombre. De esta manera, la cultura mundial está hoy socavada por un montón de transgresiones de las verdaderas leyes, dispuestas por la naturaleza, para la creación de felicidad humana, bienestar y alegría de existir. De este modo, el mundo de los negocios sólo es, en realidad en áreas muy grandes, robo y hurto genialmente camuflados. Y la inteligencia, ¿no es, dentro de un área gigantesca, el instrumento para dar forma a geniales mentiras o falsedades, dictadas por intereses propios o egoístas, tanto para elogio como para reproche, tanto para enaltecimiento como para calumnia? La inteligencia es, de este modo, un excelente instrumento para la creación de todo tipo de falsedad, calumnia y persecución. La cultura mundial actual es una excelente demostración de manifestaciones creadas por instintos de interés propio o egoístas y, por consiguiente, por el triunfo de instintos animales o mortíferos y destructores sobre el mundo por medio de la inteligencia. Mediante esta facultad la cultura mundial está, en un montón de situaciones, llena de cortinas de humo o un camuflaje dorado que oculta la verdadera realidad y, con ello, lleva a muchos hombres a manifestaciones y empresas, a compra y venta que, en mayor o menor grado, es ruinoso para ellos, pero absolutamente beneficioso para quien ha dado lugar al camuflaje. |
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