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| La inteligencia es un instrumento subordinado para la manifestación de las demás facultades mentales del ser | 2215. Hemos visto que la época de culminación de la oscuridad, en la que los hombres se encuentran, es exclusivamente una consecuencia de una combinación especial de las fuerzas de la conciencia en la psique del ser. Que la manifestación de los seres se convirtiera en oscuridad, se convirtiera en día de juicio o cataclismo es, por consiguiente, una situación muy natural del orden del universo. Las acciones de un ser, sus ideas y su relación consigo mismo y el entorno es exclusivamente un producto de su talento para experimentar y manifestarse. Este talento depende, naturalmente, de qué órganos ha desarrollado el ser y de qué órganos no ha desarrollado en su conciencia para poderse imponer con su pensamiento y con la consiguiente manifestación y actitud ante la vida. Y además hemos visto que lo que ocasionaba la transformación del animal en el hombre actual era el efecto de la incipiente entrada de la facultad de la inteligencia. Pero la facultad de la inteligencia es una facultad psíquica, técnica que, por sí misma, es totalmente dependiente. Esto quiere, a su vez, decir que es inferior a las otras facultades o propiedades de la conciencia del ser y, por lo tanto, sólo puede existir como un instrumento para la manifestación de estas facultades. De este modo, tanto puede ser un instrumento de las disposiciones animales y propiedades inmorales del ser como puede ser un instrumento de las disposiciones humanas, humanitarias o para la simpatía. Esto sólo depende de cuáles de dichas propiedades tienen predominio en la psique del ser. |
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