Lee y busca en El Tercer Testamento
| El universo es un conjunto de aparatos eléctricos | 2173. Antes de continuar con nuestro análisis de la nueva vida que, como se ha dicho, se encarna en el organismo del ser vivo y aquí se hace cargo de las funciones de los órganos, hay ciertas áreas que debemos explicar aquí. Ya hemos dicho, que toda fuerza que estimula manifestación y movimiento en la materia de los tres cosmos del universo es producida por tres formas correspondientes de electricidad. La fuerza motriz en el mesocosmos, microcosmos y macrocosmos es, así, respectivamente electricidad mesocósmica, microcósmica y macrocósmica. La electricidad es, de este modo, el análisis más profundo de todas las fuerzas existentes. Es el núcleo de fuerza más interno de la energía eólica, la fuerza hidráulica y la fuerza del vapor, del mismo modo que es el núcleo de fuerza más interno de toda explosión, tanto de la bomba atómica como de los inofensivos fuegos artificiales, tanto del petardo como de la papeleta de pólvora. Todo movimiento es, de este modo, causado por fuerza, pero toda fuerza constituye, en su núcleo más interno, electricidad de las tres categorías nombradas. Pero esta fuerza interna sólo puede experimentarse indirectamente en la zona física por medio de los efectos, los movimientos y las vibraciones que realiza en la materia física. Tanto la energía eólica y la fuerza hidráulica y todas las demás fuerzas de la naturaleza, como la fuerza de las máquinas de vapor y de los motores de gasolina y aceite son todas, sin excepción, efectos de la reproducción de fuerzas eléctricas. En los motores eléctricos y en todo el gran sistema de aparatos eléctricos, aparatos de radio y aparatos electrónicos, etc. se han alcanzado efectos más directos de esta fuerza invisible, y aquí se experimenta su presencia como un hecho. Los movimientos en la materia física que, en general, consideramos como «fuerzas de la naturaleza», tal como lluvia y sol, tormenta y calma, el oleaje del mar y el suave murmullo del arroyo, así como los movimientos tanto en la materia mineral como en las formas de vida vegetales y animales son, así, más o menos efectos directos de la reproducción de las tres formas de electricidad. En realidad, el universo es, de este modo, un conjunto completo de aparatos eléctricos. En este conjunto de aparatos todo tiene lugar exclusivamente con la electricidad como fuente interna de fuerza. Es, por consiguiente, la fuente de fuerza de las fuentes de fuerza. Pero, como electricidad es lo mismo que espíritu, aquí vemos de nuevo la confirmación de las palabras de la Biblia sobre la fuerza tras la creación: «El espíritu de Dios se cernía sobre las aguas». |
Comentarios pueden mandarse al Martinus-Institut.
Información de errores y faltas y problemas técnicos puede mandarse a webmaster.
Síntesis