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| La estructura de información mutua entre el macroser y los microseres | 2022. Por medio de un sistema especialmente desarrollado de servicio de información, formado por una organización de seres que llamamos sistema cerebral y nervioso, cuyos funcionarios especiales consisten en seres físicos y psíquicos, se comunica la experiencia de dolor y bienestar de los microseres, primero a través de los funcionarios físicos (las células nerviosas físicas) al centro físico de mando (el cerebro físico) del macroyo. Y aquí se pasa la información física a las células nerviosas psíquicas, que llevan la información física así transformada al centro de mando psíquico u órgano de registro (el cerebro psíquico conectado con el cerebro físico) del macroyo del cuerpo psíquico o espiritual del mismo ser. Y gracias a que las células físicas y psíquicas son seres con conciencia diurna que trabajan conjuntamente, el macroyo es, de este modo, informado exactamente de cómo están las cosas en las diversas regiones de su organismo. Si hay enfermedad y dolor, si hay bendición y bienestar en las regiones internas del organismo, todo es, de este modo, experimentado por el macroyo por medio de los microseres de su organismo. Del mismo modo que el estado de la vida de estos pequeños seres es, así, registrado por el yo del macroser, los impulsos y las energías del pensamiento del macroyo también regresan a la conciencia y a las regiones de los microseres y se encargan, de esta manera, del mantenimiento del bienestar y salud de estos seres. |
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Síntesis