Lee y busca en El Tercer Testamento
   Apdo.:  
(1591-1938) 
 
Búsqueda avanzada
   

 

Ante el resplandor del rostro de Dios  1918. Aunque el clímax sexual bipolar culminante antedicho sólo pueda tener lugar entre dos seres bipolares u hombres-K con un cuerpo físico y psíquico perfecto, los hombres-dios acabados, la simpatía o amor de estos seres hacia todos los otros seres es de una fuerza o capacidad tan inmensa, que conscientemente es imposible que hagan daño a ningún ser. Los organismos de estos seres están, tanto física como psíquicamente, animados por el fuego supremo. Se han convertido en células de los órganos del macroser que desencadenan el fuego supremo o amor. Llenan todo lo vivo con que entran en contacto con su amor. Se han convertido en seres que sólo pueden amar, sólo pueden acariciar, sólo pueden crear bendición, alegría y felicidad para todo aquello con que entran en contacto. Llevan el modo de ser de la ley del amor al prójimo en su cerebro y su corazón, y la sabiduría suprema en su psique, la inmortalidad en su supraconciencia y la eternidad en su yo. En verdad, aquí se ha revelado la imagen de Dios en carne y sangre, en agua y espíritu. El hombre-dios se encuentra ante el resplandor del rostro de Dios.


Comentarios pueden mandarse al Martinus-Institut.
Información de errores y faltas y problemas técnicos puede mandarse a webmaster.