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| El paraíso bíblico es idéntico al reino de la bienaventuranza | 1683. El paraíso bíblico expresa, de este modo, una existencia preterrenal. Es una forma de vida previa a la existencia de la vida física en la zona terrena, física. Y como ya conocemos los seis reinos de existencia del ciclo de espiral, no es difícil comprender que el paraíso bíblico o primera zona de existencia de Adán es el reino o zona de existencia que conocemos como «reino de la bienaventuranza». Es, por lo tanto, la sexta zona o esfera del ciclo. También sabemos que esta esfera se basa en la sexta energía básica: «la energía del recuerdo». Los detalles del reino de la bienaventuranza consisten exclusivamente en los recuerdos del ser transformados en «copias de oro». Este reino es así el absolutamente propio reino interior del individuo. Como sabemos por análisis anteriores de «Livets Bog» sobre este tema, este mundo está poblado exclusivamente por los recuerdos de seres y cosas que el ser en cuestión ha encontrado y conocido en el mundo exterior. Aquí este ser no tiene ninguna relación en absoluto con los seres vivos, verdaderos de que tratan los recuerdos. Lo que se experimenta diariamente en el reino de la bienaventuranza no es, por lo tanto, la experimentación de nuevos seres y cosas, tal como es el caso en los otros cinco reinos de existencia del ciclo. Aquí, en el reino de la bienaventuranza, no se puede experimentar nada que no sea un revivir acontecimientos ya vividos por el ser en el mundo exterior físico y espiritual. Por lo tanto, aquí, en el reino de la bienaventuranza, sólo existe el tiempo que está relacionado con los recuerdos del ser, es decir, los años o denominaciones de tiempo en que las vidas, que ahora se reviven como recuerdo, se vivieron en el mundo exterior. |
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