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(1591-1938) 
 
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Con el conocimiento de la oscuridad, el hombre terreno tiene todas las condiciones para poner en claro la estructura del universo  1628. El hecho más importante para la mayor parte de hombres terrenos de hoy será, por consiguiente, que la vida es oscura, triste, tan triste que incluso estimula el hastío de vivir y el suicidio. En medio de su avanzar a tientas en busca de conocimiento espiritual, la humanidad ha recibido un fundamento o punto de apoyo inconmovible para su búsqueda espiritual o investigación anímica. Que la mentalidad humana está en la culminación de la oscuridad es, así pues, un hecho o conocimiento absolutamente palpable. Con este conocimiento como punto de partida, el hombre terreno intelectual tiene todas las condiciones para poner totalmente en claro la estructura del universo de una manera puramente intelectual. Lo que sucede es que la vida o la naturaleza le cuentan al investigador intelectual todo sobre ellas mismas. Y como este lenguaje es una narración detallada de la naturaleza, misión y lugar de la oscuridad en el plan del universo, esta narración también es una narración sobre la luz, el ciclo y el orden que hay en el universo. Y sin una comprensión de esta narración o lenguaje de la propia vida, cualquier conocimiento de la estructura de la vida o del orden del universo será imposible. Es de aquí de donde los grandes sabios, con Cristo al frente, tienen su conocimiento. Es aquí donde se experimenta «el espíritu santo» o «el fuego supremo».


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