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(1053-1590) 
 
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Toda forma de "destino desdichado" es el efecto de un error "químico-cósmico" o una equivocación cometida por el ser en "la ley de causa y efecto" y, por lo tanto, no puede ser un "castigo" por parte de la Providencia  1263. Dado que todo está "atado a la causa y al efecto" hay la posibilidad de crear mentalidad o conciencia. Esta mentalidad o conciencia sólo está, evidentemente, formada exclusivamente por el mayor o menor conocimiento, acumulado por medio de las experiencias, de esta "ley de causa y efecto" y por la facultad, desarrollada por medio de este conocimiento, de ponerse en contacto con dicha ley. Donde se tiene conocimiento del desencadenamiento de "las causas" verdaderas de "los efectos" que se desea crear o desencadenar, uno se siente "feliz". Pero donde este conocimiento no es suficiente para poder poner en práctica con su ayuda "las causas" correctas del desencadenamiento de "las causas" verdaderas de "los efectos" que se desean, los "efectos" que aquí se revelan son, claro está, muy distintos a los que se deseaban. Que estos "efectos" no pueden satisfacer el anhelo de uno es, naturalmente, obvio. Pero no es sólo el hecho de que, de este modo, son una "decepción" que ensombrece el destino. A veces también pueden llevar con ellos un dolor tremendo, es más, en el peor de los caso pueden dar lugar a una invalidez perpetua donde directamente no han tenido como efecto la muerte directa o la destrucción del organismo temporal y la existencia física del ser. Que una experiencia así no es un "acto de venganza" por parte de la Providencia o Divinidad es aquí evidente. Que un ser se equivoque con "la sal" y crea que es "azúcar" y, por consiguiente, experimente los efectos de "la sal" en vez de los del "azúcar", no puede ser de ninguna manera un "castigo" o "venganza" por parte de la Providencia o Divinidad, sino simplemente un "error químico", una equivocación en relación con "la ley de causa y efecto" por parte del ser. La Providencia no le había impedido ni prohibido al ser en cuestión tomar "el azúcar". "El error" consistió exclusivamente en que el ser desencadenó "la causa" desacertada para los "efectos" que deseaba.


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