Lee y busca en El Tercer Testamento
| "La creación de Eva" y "la creación del hombre a imagen de Dios" están enraizadas en la transformación del ser en un ser "unipolar" y su transformación de nuevo en un ser "bipolar" | 1230. Pero es cierto que el hijo de Dios todavía no tiene conciencia de su situación. Desde el punto de vista cósmico es, claro está, un ser durmiente, aunque ahora, en virtud de su iniciación en el misterio de la oscuridad, de su capacidad material sea un ser muy despierto desde el punto de vista físico. Como hemos dicho, desde el punto de vista cósmico se encuentra en un "profundo sueño" análogo al "profundo sueño" en que se encontraba una vez, anteriormente, o sea, cuando tenía que someterse a "la creación de Eva" o adaptación orgánica a la existencia en la oscuridad. Ahora sin embargo, no es la oscuridad a lo que su estructura orgánica tiene que adaptarse, sino, al contrario, la luz. Esta "transformación" tiene lugar igual de desapercibida que "la creación de Eva" en sí, lo cual, en realidad, no es tan extraño, ya que, en principio, es el mismo proceso sólo que en orden inverso. Este proceso es, claro está, ni más ni menos que "la transformación de los polos". Mientras "la creación de Eva" estaba enraizada en la transformación del ser en un "ser unipolar" o "animal", la degeneración total del matrimonio se muestra aquí como enraizada en la transformación del ser en un "ser bipolar" u "hombre a imagen de Dios". Mientras la primera estructura orgánica fomenta "el disfrute del árbol de la ciencia", "la iniciación en el misterio del conocimiento" fomentaba la otra estructura orgánica, que ahora vamos a ver, "el disfrute del árbol de la vida", que es lo mismo que "la iniciación en el misterio de la vida". |
Comentarios pueden mandarse al Martinus-Institut.
Información de errores y faltas y problemas técnicos puede mandarse a webmaster.
Síntesis