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La incipiente vida anímica o psíquica del animal  1221. Pero, naturalmente, este "animal" todavía no tiene ni "vista" ni "oído" ni otros de los sentidos que son normales en los animales superiores y el hombre. Sólo está por encima del "ser-planta" en virtud de que ha adquirido conciencia diurna despierta de su primera e incipiente forma de "instinto de conservación". Así pues, está enriquecido con un "conocimiento" muy limitado "de sí mismo", que consiste en que puede participar o ayudar a la creación de "sensación de bienestar" para sí mismo. Y este "conocimiento" limitado es la pequeña simiente o germen de que se forma el inmenso y detallado ámbito de conciencia, que más tarde constituye "el hombre terreno" y luego "el hombre perfecto a imagen de Dios". Pero por ahora, la experiencia sigue estando dominada por "experiencias de sentimiento" robustas y sin detalles, es decir, por "sensaciones" de las reacciones del contacto de su organismo con el medio exterior, físico. El punto fijo de su facultad de atraer y, por lo tanto, de su pequeño "instinto de conservación" recién nacido es así exclusivamente la atracción por la sensación de bienestar, o sea, las reacciones del contacto con el medio físico que se perciben como "bienestar" o "placer". Y para conseguir este placer o sensación de bienestar el ser, por lo tanto, comienza aquí, tan bien como puede, a ayudar con su débil e incipiente "voluntad". Como no ha desarrollado órganos para percibir los detalles sutiles de la percepción o experiencia, el medio exterior sólo puede por el momento dejar tras sí en su conciencia "imágenes de bienestar" o "imágenes de malestar" no detalladas. Si un pequeño ser así es mutilado debido a la intervención de otro ser en su existencia, no puede comprender de ninguna manera lo que sucede, exceptuando que es objeto de un "estado de malestar". Su "conocimiento" o "imagen mental" de este estado sólo es una sensación de una especial forma de "malestar" o "dolor". Del mismo modo también experimenta, naturalmente, toda forma de "estado de bienestar". Si es expuesto a una experiencia de bienestar por parte de otro ser, esta experiencia sólo se forma, así mismo, como una imagen mental sin detalles de esta "sensación de bienestar". Pero poco a poco aprende a distinguir entre las diversas formas de "sensación de bienestar" y "sensación de malestar". Pero todavía vive en un mundo de oscuridad total y de silencio total. En su galería anímica o psíquica de pinturas todavía no hay ningún hermoso color material ni ningún hermoso tono físico o acorde musical. Por lo que respecta a la luz y al sonido, aquí todo descansa todavía en la más profunda noche.


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