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| "La luna de miel" sólo es un débil reflejo del matrimonio divino inicial | 1202. Esta masa no conoce, así pues, el matrimonio divino inicial, en el que los cónyuges forman totalmente "una carne", tienen los mismos intereses, la misma voluntad, la misma actitud frente a la vida, y en el que "el hombre" es la cabeza de "la mujer", su señor o propietario total. ¿No sucede precisamente que el matrimonio divino hoy sólo existe como un pequeño y breve periodo al comienzo del matrimonio moderno, en que ambas partes todavía están muy enamoradas mutuamente? En este periodo inicial del matrimonio, la posesión mutua de las partes es la esfera de interés que todo lo eclipsa y compensa o anula todos los eventuales intereses que no favorezcan esta posesión. Este periodo del matrimonio será, por lo tanto, un periodo luminoso y feliz para las partes, y es por esto que se le ha dado la denominación de "luna de miel". "La luna de miel" es, así pues, un débil resplandor o una consecuencia del matrimonio divino, inicial. |
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