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| El alimento perfecto para el hombre perfecto es "la fruta prohibida" del "árbol de la ciencia" |
1156. ¿No eran, precisamente, "Adán" y "Eva" en un cierto estadio la expresión del ser "imperfecto" o "inacabado" que hoy domina el mundo?
"El Adán" y "la Eva" modernos, ¿no tienen precisamente necesidad de la orientación de Dios con respecto a lo que tienen que comer?
¿No creen que sería bueno que estos seres pensasen un poco sobre lo que el Creador eterno ha preparado como el alimento perfecto para el hombre perfecto?
¿No resonaron las palabras del Creador con respecto a este campo a través del mundo a lo largo de milenios?
Y estas palabras: "Ved que os he dado todas las hierbas que producen simiente sobre la faz de la Tierra, y todos los árboles que producen simiente de su especie, para que os sirvan de alimento a vosotros", ¿no han sido traducidas a todos los idiomas más importantes del mundo?
Aquí Dios no dice nada del horroroso sistema de carnicería o principio asesino que el moderno "Adán" y "Eva" poco a poco se han sugestionado a creer que es una condición vital para su mantenimiento de la vida.
¿No dice el quinto mandamiento, al contrario, exhortando a todos los pueblos:"No matarás"?
En este mandamiento no se dice que sólo son "los hombres" a los que no se puede matar.
Al contrario, la voz divina dijo durante el gran proceso creador en relación con los animales: "Produzcan las aguas reptil de ánima viviente, y aves que vuelen sobre la Tierra, en la abierta expansión de los cielos.
Y crió Dios las grandes ballenas, y toda cosa viva que anda arrastrando, que las aguas produjeron según su género, y toda ave alada según su especie; y Dios vio que era bueno.
Y Dios los bendijo diciendo: fructificad y multiplicad y henchid las aguas en los mares, y las aves se multipliquen en la Tierra.
Y fue la tarde y la mañana el día quinto.
Y Dios dijo: produzca la Tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la Tierra según su especie (…), y todo animal que anda arrastrando sobre la Tierra según su especie; y vio Dios que era bueno."
En la plática o mandato divino para la vida del "hombre" que surgirá después no se dice nada sobre que tuviera que matar desenfrenadamente a estos seres, que tuviera que ser un obstáculo para que estos seres cumplieran el mandato divino:"fructificad y multiplicad", o de que poblasen las aguas de los mares, el aire y los continentes. En la voz divina no hay nada que le mande a Adán que "coma a los animales" o a los semejantes provistos de "ánima viviente". ¿Y no creen que es, precisamente, esta desviación de las palabras del Todopoderoso lo que era "la fruta prohibida" del "árbol de la ciencia"? ¿No es, precisamente, esta desviación de la vida divina lo que da dolor y sufrimiento? Y éstos, ¿no son, a su vez, sinónimo de "experiencias" fundamentales? Y "las experiencias", ¿no son sinónimo de "conocimiento"? Y "el conocimiento", ¿no es "la fruta" del "árbol de la ciencia"? ¿Y se tendría algún conocimiento detallado y vivido personalmente de la verdadera naturaleza de la vida si nunca se hubiera encontrado su contraste? No, de ninguna manera. En cambio se puede muy bien poseer la facultad propia de la vida perfecta de cumplir la ley del amor, tal como siempre es el caso en las primeras zonas de una nueva espiral, en que la vida es desencadenada por el estado de conciencia cósmica, que el ser tiene de la espiral anterior como función automática o "conocimiento-C", que aquí, en la nueva espiral, aparece como idéntico al denominado "instinto". |
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