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(1053-1590) 
 
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Que el principio paterno terreno esté representado por dos seres no impide que este principio, según su idea básica, sea idéntico al principio paterno sobrenatural que sólo está representado por un ser  1123. "El principio paterno terreno" sólo es, así pues, en realidad un reflejo muy leve del "principio paterno sobrenatural" que aquí se muestra. Del mismo modo que el hombre terreno durante un corto periodo de tiempo surge de una representación terrena de los dos polos: "masculino" y "femenino" o "principio paterno" y "principio materno", "el ser vivo" también surge de una representación sobrenatural de los mismos polos, pero aquí esto no está sólo en vigor un "corto tiempo", aquí está en vigor toda "la eternidad". Pero del mismo modo que "el niño" terreno es amamantado, atendido y cuidado por la vida, las disposiciones, la carne y la sangre del "principio paterno terreno", "el ser vivo" también es "amamantado", "atendido" y "cuidado" totalmente por "el principio paterno sobrenatural", la vida, la conciencia, las disposiciones, la carne y la sangre de dicho principio alimentan su conciencia. Que "el principio paterno terreno" esté representado por dos "seres vivos": "el padre" y "la madre", mientras "el principio paterno sobrenatural" sólo está representado por un solo "ser vivo": "la Divinidad", no impide que la especial naturaleza o idea básica del "principio paterno terreno" y del "sobrenatural" sean idénticas. Según su naturaleza más elevada, "el ser vivo" es, claro está, un ser que tiene ambos polos con un despliegue igual o en equilibrio en su propio cuerpo y, de este modo, constituye a la vez "el principio masculino" y "el femenino", es decir, "el principio paterno" y "el materno", con lo cual representa simultáneamente la más alta perfección de la vida de la conciencia, la mentalidad y el espíritu. En la zona en la que reside en la evolución o ciclo de espiral forma, por consiguiente, parte de un método de reproducción que se encuentra totalmente fuera del que condiciona que "la mujer de a luz a sus hijos con dolor", un método que sólo está condicionado por "la caída del primer hombre" o zona de la oscuridad y sólo está vigente aquí. Más tarde, en la descripción de los mundos exteriores del ciclo de la espiral, trataremos más profundamente estos principios. Aquí sólo los insinuamos para darle al lector un pequeño suplemento para confirmarle cómo el universo o Divinidad en sí constituye el más alto "principio paterno", y que "el ser vivo", como un hijo de este principio, es inalterablemente idéntico a un "hijo de Dios".


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