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Por qué el análisis temporal de las palabras del redentor del mundo es ilógico o falso, y el análisis cósmico de las mismas palabras es lógico y verdadero   995. ¿En qué consiste entonces esto que es falso? Cuando por ejemplo las declaraciones de Jesús dicen que "el que a espada mata a espada morirá", por lo general esta expresión sólo se comprende textualmente o al pie de la letra, es decir,que el ser en esta situación morirá. Pero como el ser contiene "el algo", que es "el punto fijo que experimenta", no puede ser este "algo" lo que tiene que morir. ¿Y por qué tendría que morir? El problema no está en "el algo" estacionario, inmóvil o inalterable en sí del ser. Lo que tiene que transformarse es precisamente lo variable, es decir, "el movimiento", cosa que también se expresa en la frase, vista desde el punto de vista cósmico. Aquí es, justamente, una indicación de cómo puede tener lugar esta transformación del "movimiento". Cuando "el movimiento 1" se pone en contacto con "el movimiento 2" surge "el movimiento 3". No se dice de ninguna manera en absoluto que va a suceder algo con "el punto fijo" o "el algo que experimenta" en el ser. De lo único que el lenguaje o las palabras anteriormente citadas del hijo de Dios pueden tratar es de "combinaciones de movimientos" y de sus efectos en forma de nuevas "combinaciones de movimientos". Pero cuando "el punto fijo" o "el algo que es", que hay en el ser, no puede perecer o ser afectado por "el movimiento", tampoco puede "matarse" ni "perecer". Lo único que puede "matarse" o "perecer" sólo puede ser no lo que constituye "el punto fijo" del ser, sino al contrario lo que constituye "movimiento". Y lo que es movimiento en el ser es, claro está, el organismo. El sentido absoluto de la declaración pronunciada por Cristo se puede expresar en su forma final o absoluta de la siguiente manera: "Los que matan a espada (matan el organismo con espada) verán su organismo muerto a espada".
      Como se ve, la declaración divina aparece aquí de una forma al cien por cien sin velo y totalmente en contacto con el análisis cósmico de la situación en cuestión o en armonía con las leyes de la vida o lo que verdaderamente puede tener lugar. Mientras la declaración divina en su forma velada expresa que es el ser o "el algo vivo" lo que en la situación mencionada va a perecer, esta misma declaración expresa en su forma sin velo que sólo es el organismo y, por consiguiente, una determinada forma de "movimiento" lo que va a "perecer", lo cual quiere decir una simple transformación de "movimiento". El camuflaje hace, así pues, la declaración divina falsa, dado que le hace expresar que el ser vivo va a morir, mientras que la declaración presentada expresa, totalmente sin velo, que el ser vivo va a experimentar una nueva situación, lo que sólo puede significar que va a vivir, porque la existencia de la vida es estimulada únicamente en virtud de la experimentación de nuevas situaciones o de la transformación de "movimientos" en nuevos "movimientos". Pero la experimentación de situaciones o constatación de la transformación de los movimientos no podría tener de ninguna manera lugar si no fuera en virtud de su contrario: "el punto fijo" absoluto. Y como "el algo" único que existe fuera del "movimiento" es lo que puede experimentar o percibir, no sólo su existencia eterna, sino también la continuación de su experimentación de la vida es anunciada por medio de la declaración del redentor del mundo. Y la riqueza y brillo altamente intelectual de sus palabras divinas centellearán y resplandecerán en el cielo cósmico, aunque los mundos físicos y sistemas de planetas perezcan.
      Mientras la forma sin velo de la declaración del redentor del mundo le da a dicha declaración un sentido o una lógica fundamental, la declaración en su forma velada indica una transformación de algo que no puede transformarse, una destrucción de algo que de ningún modo puede destruirse y, por consiguiente, es ilógica o absolutamente falsa. Y así tenemos ante nosotros la diferencia que siempre habrá entre un análisis "relativo" o "temporal" (que, por su parte, quiere decir un análisis que sólo constituye la relación de un "movimiento" con otro "movimiento") y un análisis "absoluto" o "cósmico", o un análisis que constituye la relación de un "movimiento" con "el punto fijo" absoluto o "el algo" eterno "que es", que existe y experimenta tras "el movimiento".


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