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La conversación de Jesús con Nicodemo revela un aspecto de la misión del redentor del mundo distinto al de dar "el perdón de los pecados"   864. Pero en los labios del redentor del mundo vibraban también otras, y todavía más luminosas, ondas mentales de luz que las fórmulas artificiales para la liberación de complejos de pecados ilusorios y los consiguientes sufrimientos relacionados con ellos. La fórmula:"Tus pecados te son perdonados" no fue un factor dominante en lo que el redentor del mundo les decía a quienes lo rodeaban, es más, casi nunca fue usada por él con respecto a sus discípulos o a otros seres que buscaban la sabiduría de una manera especial, al contrario, aquí sus palabras eran muy distintas. Es verdad que aquí, en muchos casos y hasta un cierto grado, tenía que hablar con fórmulas o parábolas, pero a grandes rasgos la manifestación de su espíritu era enseñanza directa o esclarecimiento intelectual de los hechos eternos o del misterio de la vida en sí. ¿Qué opinan ustedes, por ejemplo, de su conversación con Nicodemo? ¿No es altamente intelectual en su sentido más puro? "En verdad, en verdad te digo que quien no naciere de nuevo no puede ver el reino de Dios" dice el redentor del mundo. Que aquí se trataba de la reencarnación o renacimiento se ve claro en la extrañeza de Nicodemo cuando dice: ¿"Cómo puede nacer un hombre, siendo viejo? ¿Puede acaso entrar de nuevo en el seno de su madre para renacer"? Y Jesús responde recalcándolo todavía más. "En verdad, en verdad te digo, que quien no renaciere del agua y del espíritu no puede entrar en el reino de los cielos. Lo que ha nacido de la carne es carne, mas lo que ha nacido del Espíritu, es espíritu". Al mismo tiempo intenta mitigar la gran extrañeza de Nicodemo diciéndole: "No te extrañes que te haya dicho: Os es preciso nacer de nuevo. El viento sopla donde quiere, y tú oyes su sonido, mas no sabes de dónde sale o adónde va; eso mismo le sucede al que nace del Espíritu".


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