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La ciencia moderna y el "punto fijo" absoluto. Un campo en el que el hombre terreno ahora ya "ve desde un punto de vista cósmico"   814. Mientras la ciencia moderna no haya encontrado "el punto fijo absoluto" tras todos los movimientos, todas las materias o sustancias que constata, mide y pesa o maneja basando sus hipótesis e ideas sobre la vida en dichos movimientos y materias, los científicos no podrán jamás alcanzar ningún "conocimiento cósmico", es decir, un conocimiento absoluto sobre ellos mismos. Su conocimiento de qué y quién sólo será en todo caso, sin ninguna excepción, un conocimiento sobre sustancias y materias, un conocimiento sobre las reacciones del contacto de los movimientos con otros movimientos. Manejan un océano de productos y creaciones sin poder encontrar, y por consiguiente reconocer, un creador, es más, niegan incluso en muy alto grado su existencia. Imagínense que el pájaro en el aire y el pez en el agua se creyesen, así mismo, uno con el aire y con el agua respectivamente. Imagínense que el constructor no pudiera conocer la diferencia entre él y la casa que ha construido, o que el sastre sólo pudiera considerarse a sí mismo como un simple traje. Sí, estas cosas parecen extrañas, pero sólo son simplemente un conocimiento verdaderamente relativo comparado con el conocimiento que el hombre en general tiene en los campos en que su facultad de percepción ve más claro o es más aguda, a saber, en el campo de su propia creación o producción. Aquí no caerán, sin embargo, en la ilusión de que la casa y el constructor o el sastre y el traje son idénticos. Aquí hace tiempo que están en condiciones de ver que los dos fenómenos sólo han podido crearse en virtud de un "origen con voluntad". Y este reconocimiento es en sí mismo de tipo puramente "cósmico" y no es ninguna forma de relatividad. No depende del "ojo que ve". Es un "resultado cósmico" eterno. Es el conocimiento total del principio de vida "yo" y "esto" en sí.


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