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Por qué la expresión "sustancias de la vida" se convierte en nombre común de todos los detalles principales del análisis especial de la vida o conciencia en sí   778. Antes de continuar mostrando "las sustancias de la vida" vamos a detenernos un poco y ocuparnos de diversos fenómenos que pueden reforzar nuestros conocimientos previos y, con ello, nuestra capacidad de poder comprender "las sustancias de la vida" venideras, y la culminación de su interacción en la combinación que llamamos "el ser vivo".
      De manera preliminar hemos entrado en contacto con "la sustancia de la vida n.º 1" (el deseo primario), "la sustancia de la vida n.º 2" (hambre, atracción, movimiento), "la sustancia de la vida n.º 3" (saciedad, quietud o descanso), "la sustancia de la vida n.º 4" (materias fecales, repulsión, movimiento) y "la sustancia de la vida n.º 5" (sustancia o materia). Quizá los lectores se asombrarán un poco de nuestra denominación de las cuatro primeras realidades de la experimentación de la vida como "sustancias". Cuando sólo la realidad n.º 5 puede designarse como "sustancia", ¿cómo puede, entonces, estar justificado calificar a las cuatro realidades precedentes de "sustancias"? Aquí el lector debe recordar que lo que estamos definiendo es "la vida" en sí, la conciencia en sí, que, a su vez, quiere principalmente decir "X3". Sabemos, claro está, que dicha "X" se compone de algo más que de lo que llamamos "sustancia". Constituye, de este modo, tanto voluntad y pensamiento como percepción, que son manifestaciones que no estamos en absoluto acostumbrados a expresar como "sustancia". Pero si no son "sustancia", ¿qué son entonces? El análisis más sencillo de estas manifestaciones sólo puede ser que constituyen "algo". Si constituyesen una "nada" absoluta, no existirían. Pero es un hecho que existen. Y tienen que considerarse como constituyendo "algo", igual que lo que llamamos "sustancia". Todo aquello de que la vida misma está formada constituye, por consiguiente, "algo", ya se trate de lo que calificamos de "sustancia" o de cosas que en la vida cotidiana de ningún modo acostumbramos a hacer entrar en este análisis. No podemos prescindir del hecho de que un "algo" que todo lo abarca constituye, por consiguiente, de un modo inalterable el material del cual la vida está formada. Los lectores deben recordar aquí que, en relación con esto, "la vida" es lo mismo que la totalidad de "la conciencia" del yo.
      Pero cuando, de este modo, todo es "algo", de lo cual la vida o conciencia está formada, este "algo", desde el punto de vista cósmico, es lo mismo que una "sustancia", aunque, desde el punto de vista físico, sea "inmaterial". Nada puede, desde el punto de vista cósmico, ser "inmaterial". Una cosa que existe no puede ser al mismo tiempo una cosa que no existe. Y "algo" que existe no puede, tal como el investigador evolucionado verá aquí, existir sin de un modo u otro ser alguna de las manifestaciones de las que la vida está hecha o formada. Y como todo lo que en esta serie de análisis queremos presentar a los lectores son, especialmente, las manifestaciones de las que está formada "la vida" o la conciencia del yo, hemos optado por darles a todas ellas la denominación de "sustancias de la vida". Esta expresión será de aquí en adelante una denominación común de todo lo que existe como detalles en "X3", o de todo lo que atañe a "la vida" misma o a la conciencia del yo. "Las sustancias de la vida" serán, así pues, lo mismo que "sustancias de la conciencia". Y como todo lo que existe es una expresión o manifestación de "vida", (nada puede existir aquí como una excepción) todo será idéntico a "las sustancias de la vida", tanto las cosas consideradas materiales como las consideradas espirituales, tanto la creación como lo creado, el movimiento como la quietud, tanto las materias sólidas como las gaseosas. Y como en este capítulo de "Livets Bog" nuestro cometido es poner estas realidades o manifestaciones en su verdadero lugar, he pensado que la forma más simple de hacerlo y, por consiguiente, más fácil de comprender tenía que ser con una denominación común numerada. Y por lo tanto, vamos a estudiar aquí cada uno de los detalles más destacados e importantes con la designación "sustancia de la vida" número tal o cual, según el lugar que ocupen en el orden sucesivo desde el primer detalle de la conciencia o experimentación, es decir, "el deseo primario", y en dirección descendente en el gran océano del mundo de las formas.
      Por lo tanto, que a una cosa se la designe como "sustancia de la vida" no significa siempre que sea una "sustancia" en el sentido habitual de la palabra. Esto, como el lector ha visto, también puede significar que es un detalle "inmaterial" en la serie de análisis de la conciencia misma.


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