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Se produce la inclinación del eje de la Tierra, catástrofes gigantescas en el pasado   662. Que el eje de la Tierra tenga la mencionada inclinación se debe solamente a un excesivo despliegue de peso en la conciencia de la Tierra, es decir, a un despliegue mental que fue demasiado violento y la hizo salir de su lugar natural en el sistema. Este despliegue mental, al que volveremos más tarde, ha llevado consigo una especie de choque o sacudida para el organismo físico del yo de la Tierra y su lecho "se ha desplazado". Que esto no ha podido tener lugar de una manera callada o desapercibida para sus microindividuos es, naturalmente, obvio. Y también tenemos leyendas sobre grandes catástrofes naturales, sobre continentes que han desaparecido, que se han hundido en el mar. Tenemos relatos sobre el diluvio, "Quince codos se alzó el agua sobre los montes, que tenía cubiertos", y otros parecidos. Que gigantescas catástrofes de este tipo han tenido lugar no puede negarse. Pero las indicaciones detalladas con respecto a la época y lugar de estas gigantescas catástrofes y "la altura del agua" no tienen ninguna importancia con respecto a nuestro tema. Sin embargo, tenemos que acentuar, tal como ya hemos dicho, que la causa se debe a un despliegue mental con demasiada energía del peso. Como el ser-Tierra sólo puede tener un despliegue mental demasiado fuerte para con sus semejantes, que forman parte de su propio mesocosmos, este despliegue mental equivale a una correspondencia entre el ser-Tierra y uno o varios de estos seres. Como estos seres que están por encima de nosotros forman los fenómenos que llamamos "astros", este choque, que ha provocado la inclinación del eje de la Tierra, corresponde a un intercambio de energía demasiado fuerte entre ella y estos cuerpos al relacionarse con ellos. Que este intercambio demasiado fuerte de energía se haya manifestado, en su conducta puramente física, en el hecho de que uno de estos cuerpos en su camino por el espacio se ha acercado peligrosamente a la órbita de la Tierra o bien con otro fenómeno físico, no cambia en absoluto el antedicho análisis. Por consiguiente, nuestro único cometido aquí es mostrar los efectos actuales de estas lejanas catástrofes gigantes. Y como ya hemos dicho, estos efectos son la causa de que el hombre terreno tenga, en cierta medida, que crear la defensa o protección de su existencia o su vida que el globo terrestre, debido a su invalidez provocada por catástrofes en el pasado, ahora no está en condiciones de procurarle. La vida en el organismo del globo terrestre es, por consiguiente, debido a dicha invalidez, algo más difícil para sus microseres que lo que habría sido si la inclinación de su eje fuese la normal con respecto al centro del sistema.


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