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La primavera del ciclo del día |
651. Y es la misma atmósfera divina la que domina totalmente la aparición de la mañana.
Desde la salida del sol hasta el mediodía tenemos "el territorio de la primavera" o periodo de irrupción del día.
Y el citado resplandor de paz celestial es lo que hace que el nacimiento del día sea áureo hasta un grado tal que ha inspirado a los poetas a usar la expresión "La madrugada tiene oro en la boca1.
Pero el sol sale, surgen la luz y el calor, y con ello la manifestación de vida. Los seres despiertan de su sueño nocturno, del sueño invernal del ciclo del día. "Los troncos y las ramas sin hojas" se llenan de nuevo de "follaje". Los seres comienzan a pensar, comienzan a trabajar. Y los cuerpos que antes dormían tan confiados y descansaban tan tranquilos han alcanzado pleno vigor. "El follaje se despliega". Los seres cantan, hablan, se regocijan. Es "el cuco que de nuevo canta cucú en el bosque". La frescura y el brillo de los ojos delatan la alegría y el bienestar que produce pensar en las experiencias del nuevo día. Ha llegado el ciclo de "la primavera" del día. La mañana es el segundo principio del ciclo. |
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