Lee y busca en El Tercer Testamento
| Véase "Esquema sobre la estructura del sistema numérico" en nueva ventana |
| El cero como expresión del "algo divino" o "X1" | 1023. Nos hemos dado una primera idea de que tras el cero no se esconde, de este modo, una "nada", sino un "algo", un "algo" que se ha mostrado a plena luz o ha sido conocido en el ciclo de espiral siguiente. Y, así pues, el cero no puede, en ninguna ubicación en el sistema numérico decimal, ser llevado a expresar una "nada" absoluta. Si figura en relación con un número expresa "algo" y si figura sólo también expresa "algo". Expresa ni más ni menos todo el universo, el infinito y la eternidad. Porque, con qué otro número tendrían, si no, que escribirse estos factores eternos. Estos fenómenos ¿no expresan, acaso, todos los contrastes existentes a la vez? ¿No son a la vez lo mayor y lo menor, lo coloreado y lo sin color, lo hermoso y lo menos hermoso, etc.? Pero algo que constituye todo lo existente a la vez se encuentra, claro está, por encima de toda manifestación o accesibilidad para la percepción sin que su existencia cese por ello. Pero algo que existe, que no es accesible para la percepción sólo puede, claro está, expresarse como "algo que es". Y donde el cero figura solo, éste únicamente puede existir como expresión del análisis con que aparece "el algo divino". Y aquí llegamos al hecho de que el primer signo o la primera letra del alfabeto numérico decimal por propia naturaleza expresa exactamente "el algo" eterno "que es", es decir, "X1" o yo del ser vivo o universo. Y tras haber llegado al conocimiento de esto, hemos adquirido con ello una llave que abre o revela totalmente el presunto "misterio de los números" para nosotros. |
Comentarios pueden mandarse al Martinus-Institut.
Información de errores y faltas y problemas técnicos puede mandarse a webmaster.
Síntesis