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| Por qué el ser clarividente o consciente cósmicamente no juzga a partir de fenómenos visibles, perecederos. La confirmación de las grandes frases bíblicas heredadas del pasado. El amor es la naturaleza totalmente dominante del clarividente |
548. No es nada extraño que el observador "con clarividencia cósmica" no juzgue a partir de fenómenos visibles y temporales.
Cuando se contempla tras el mundo de las ilusiones y se ve la realidad absoluta tras las formas, uno no se deja perturbar por una ilusión.
¿Qué significa que un hombre vaya vestido de harapos o con púrpura y oro?
¿Qué significa que sea un emperador o un vagabundo andrajoso?
Estos fenómenos son igual de temporales, igual de ilusorios.
Qué significa que un ser critique y calumnie a uno, lo que manifiesta son, claro está, ilusiones y espejismos, del mismo modo que lo que puede alcanzar con su crítica y su calumnia tampoco puede ser, en ningún caso, otra cosa.
Frente a "lo absoluto" o "eterno" resbala toda crítica o calumnia, con lo cual se manifiesta su "santidad" o inviolabilidad.
Que otros se enfurezcan llenos de ira o de odio contra un ser que calumnia y persigue también se comprende cuando uno tiene conciencia de su supraconciencia, porque en tal situación el calumniado no conoce el espejismo.
Para él el mundo de las ilusiones es lo único verdadero.
Es la misma superstición que activa toda la guerra y la discordia del mundo.
Pero, naturalmente, es necesario percibir esta superstición como realidad mientras uno no conozca nada sobre la realidad absoluta.
Pero que los errores llevan a la revelación de la realidad, y de este modo todos los seres llegan al conocimiento absoluto, y que la vida, por consiguiente, sólo puede expresarse con el único y gran resultado que dice que "todo es muy bueno", es algo divino.
Aquí se ve muy claro cómo el amor tiene necesariamente que ser el clima de pensamientos fundamental para los seres que poseen el conocimiento supremo. También vemos aquí que los grandes resultados heredados del pasado están en sumo grado en contacto con la realidad absoluta, y que sus orígenes manifiestan un nivel intelectual o sabiduría culminante cuando declaran: "No temáis a quienes matan el cuerpo porque no pueden matar el alma" (lo absoluto o eterno del ser), "Ante el Señor un día es como mil años, y mil años como un día" (cada limitación contiene, evidentemente, el infinito). Del mismo modo, cuando el redentor del mundo dice en la cruz: "Padre perdónalos porque no saben lo que hacen", esto expresa el conocimiento más claro posible del mundo de las ilusiones y una voluntad dirigida totalmente por esta misma visión cósmica. Aquí se ve claramente que un conocimiento absoluto de que todos los "crucificadores" son prisioneros de la creencia en el mundo de las ilusiones como realidad y por lo tanto sólo pueden, naturalmente, actuar a partir de aquí, tiene que eliminar toda antipatía, toda irritación, mala voluntad y cólera contra estos verdugos de la vida, y que el amor se convierte en la naturaleza totalmente dominante en "el clarividente" o ser unido con la Divinidad, y que sólo esta actitud para con la vida y la existencia puede ser el fundamento para experimentar la paz verdadera, absoluta y, por consiguiente, eterna. |
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