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Una "visión" de una cosa no es lo mismo que la cosa en sí  541. Lo único que existe de un modo absoluto es, así pues, "un algo que es". Pero en la existencia cotidiana a este "algo" no lo vemos con su existencia sin nombre porque ésta, como hemos visto aquí, es simplemente inaccesible para la percepción. Cuando no obstante, "vemos", es decir percibimos o experimentamos, este "algo", esta "visión" es una ilusión porque jamás, en ninguna circunstancia, puede ser otra cosa que una "visión" de dicho "algo" y no este "algo" en sí mismo. Esto se confirma tanto más cuanto que una visión o percepción sólo es una reacción de la cosa.
      Que una visión de una cosa y la propia cosa son dos cosas se convierte en un hecho por la circunstancia de que una visión o una experiencia tiene que ser inexorablemente un resultado de una causa. Esta causa es la cosa en sí misma, mientras "la visión" es un resultado de la cosa. Que "la visión" de la cosa y la cosa en sí son dos cosas se muestra además por el hecho de que la cosa puede existir, aunque no se la vea, mientras que es imposible que "la visión" de la cosa exista sin la existencia de la cosa. Además, la visión de una cosa puede multiplicarse, ya que surgen tantas visiones o experiencias de la cosa como ojos o conjuntos de sentidos que la ven, sin que la cosa cambie o se reproduzca lo más mínimo en ninguna dirección a causa de ello. La cosa sólo sigue siendo la misma y única cosa, bastante independientemente de que su visión se haya multiplicado mil veces. Es imposible que "la visión" de una cosa y la propia cosa sean la misma cosa. Cuando, por consiguiente, un "algo n.º 1" "se ve a sí mismo", esta "visión" y dicho "algo" serán, de este modo, dos cosas. Pero dado que, como ya sabemos, sólo existe un "algo n.º 1", "la visión" de este "algo" es una ilusión. La existencia de esta ilusión es, así pues, una realidad verdadera. Lo ilusorio de este "algo que es" que acabamos de nombrar es, por consiguiente, su aparición como un análisis detallado de un "algo n.º 1". Esta aparición es algo muy distinto de lo que parece ser. Parece ser real pero es irreal, dado que "el algo n.º 1" está por encima de toda forma de análisis, aparte de ser "un algo que es".


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