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| El análisis básico del universo sólo puede existir como constituyendo una "trinidad" | 535. El análisis básico, absoluto del universo o la realidad existente jamás puede exponerse de una manera perfecta si no es en forma de la presente "unidad trina". Esta manifestación trina constituye, precisamente, el fundamento en el que se apoya toda la manifestación de este "algo" como ser vivo. Por consiguiente, el primer "algo", en virtud del "algo n.º 2", puede "crearse una manifestación visible de sí mismo". Esta "manifestación visible" es, como hemos dicho, "el algo n.º 3". Este tercer algo constituye, por consiguiente, la manifestación visible de "algo" que en sí mismo es "invisible". Esta manifestación visible es, por ello, una ilusión. Sólo aparece como una realidad producida, creada o "imaginada" desde la realidad absoluta y nunca, en ningún caso en absoluto, puede ser otra cosa. Siempre habrá una barrera insuperable entre la realidad absoluta y la realidad ilusoria o "creada". Pero el ser vivo sólo puede considerarse dichoso por esto, porque sin estas dos formas de realidad no habría nada llamado "conciencia", "manifestación" o "creación" y, por consiguiente, ninguna percepción, ninguna experimentación de la vida, ningún conocimiento de la identidad cósmica de los seres vivos. La muerte sería la realidad absoluta, y la realidad absoluta que ahora existe sería una ilusión, mejor dicho, una "nada" absoluta, porque ni siquiera podría crearse una ilusión, ya que todo sería una quietud de muerte absoluta. El universo sería, así pues, una "nada" absoluta, lo cual, cosa evidente para todos, es lo contrario al hecho que la realidad representa o constituye. |
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