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"La relativa" base de conocimiento del hombre terreno como fundamento de todas las desavenencias del mundo y la consiguiente discordia y estado de guerra  501. Por lo que antecede sabemos que cuando el hombre terreno común reconoce una cosa como "oscura", esto no significa que la cosa sea verdaderamente oscura, sino al contrario que la cosa pertenece a un peldaño de "la escala de luz" subyacente a este ser. Si hubiese pertenecido a un peldaño de esta escala superpuesto a dicho ser, éste la habría percibido como "luz".
      Dado que los seres humanos terrenos se encuentran en peldaños sumamente distintos de "la escala de luz", sus peldaños superpuestos y subyacentes también son sumamente distintos. Los peldaños superpuestos para algunos pueden, de este modo, ser subyacentes para otros. Como consecuencia de esto, "la sustancia" que por algunos se percibe como "luz", se percibe como "oscuridad" por otros y a la inversa. Y esta base primitiva de conocimiento es el fundamento de todo lo que conocemos como "desavenencias". El hombre terreno común no tiene ningún conocimiento real de amplitud suficiente de la naturaleza de "los peldaños de la sustancia" o "de la luz". Es por esto que en muchas situaciones opina que otros seres tienen que pensar, juzgar, y actuar de la misma manera que él. Como esto es imposible para todos los seres subyacentes, ya que no están en el peldaño o punto de observación del primer ser y, por consiguiente, tampoco pueden tener el mismo panorama que éste, aquí estamos junto a la primera causa de la guerra o junto al fundamento de todo sufrimiento o creación de destino oscuro.


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