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El principio en que se basa un grupo degenera, pero todavía es tan prominente que sirve de base para la creación de estados, sociedades o asociaciones modernas  476. Pero a medida que el ser avanza en el ciclo de la espiral o en la evolución va teniendo cada vez más capacidad de poder valerse por su cuenta, lo que en este caso quiere decir que desarrolla su "individualidad" y su dependencia del grupo degenera.
      Cuando la dependencia del grupo degenera en el ser, entonces surge la base de todo lo que conocemos en forma de creaciones de estados, nacionalidades, todas las formas de sociedades, asociaciones profesionales, compañías comerciales, sectas o comunidades religiosas, etc. Su fundamento es exactamente el mismo que da lugar a la creación de manadas de lobos salvajes del desierto. Se unen para protegerse o poder disfrutar del gran poder y autoridad que una acción conjunta da frente a la actuación de un ser solo.
      Este principio ha sido tan inmensamente fuerte y fundamental que todavía en cierta medida crea zonas condicionadoras de vida (estados), si bien ahora existen muchas agrupaciones muy débiles, dado que en su seno tienen seres en cuya afiliación frecuentemente se nota un cansancio tan grande que abandonan el grupo. Este abandono del grupo es, a veces, tan enorme que significa su destrucción. Pero los seres todavía no son tan independientes, no están mental y físicamente tan estabilizados que pueda considerárseles libres de la dependencia del grupo. Y el resultado de esto es que tarde o temprano se afilian a nuevos grupos, es decir, a asociaciones o sociedades políticas, religiosas o laborales.


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