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"Comen el fruto del árbol de la ciencia". "La fruta prohibida"  84. El estado del hombre terreno aparece, en gran medida, como oscuridad. Esta oscuridad representa, ante todo, para el hombre terreno el resultado de la manifestación animal o "caída". En segundo término, este resultado adquiere una naturaleza más profunda ya que desarrolla el conocimiento del "bien" y del "mal". "La caída" es de esta manera, en su análisis más profundo o cósmico, "comer del árbol de la ciencia del bien y del mal". Como "la caída" es lo mismo que manifestarse en contacto con el principio de vida animal, dicho principio aparece aquí como sinónimo del "árbol de la ciencia". Manifestar "poder en vez de justicia", manifestar que "es mejor agarrar para uno mismo que dar", vivir según las palabras "que cada cual se ocupe de sí mismo", o según otras expresiones del principio de vida animal será, de este modo, idéntico a las manzanas que desde que surgió la irradiación luminosa del principio creador se transformaron en "la fruta prohibida", cuya consumición en la incipiente zona de dicho principio tiene como consecuencia "la expulsión" de la forma de armonía y felicidad en que se basa el reino animal.


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