Lee y busca en El Tercer Testamento
| El hombre terreno tiene que "comer el pan con el sudor de su rostro". "La mujer dará a luz a sus hijos con dolor". "La maldición" | 83. Los estados que el hombre terreno experimenta actualmente no son, de este modo, "paradisíacos". La más alta felicidad material que puede conseguir es la riqueza y el lujo, pero como esta felicidad sólo puede existir a base de la indigencia, la necesidad y la miseria de otros seres, se traducirá continuamente en odio, delitos, huelgas, lock-outs o cierres patronales, revoluciones, guerras y mutilaciones y, por consiguiente, será sinónimo de desgracia para el conjunto de la sociedad del hombre terreno, y será una prueba irrefutable de un sistema social imperfecto que hace que "el hombre" todavía tenga en gran medida que "comer el pan con el sudor de su frente". Pero esto es la destrucción o degeneración de una mitad del reino animal, que en relación con la otra mitad, que se manifiesta como anomalías sexuales, matrimonios desgraciados, falta de sentido de responsabilidad e infidelidad, hace que "la mujer, de manera creciente, "dé a luz a sus hijos con dolor". "La maldición" en forma de la degeneración o destrucción del reino animal se cierne, de esta manera, sobre la sociedad del hombre terreno. |
Comentarios pueden mandarse al Martinus-Institut.
Información de errores y faltas y problemas técnicos puede mandarse a webmaster.
Síntesis