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"La energía de la intuición". "Conciencia cósmica". "El punto de vista de la propia Divinidad". "El mundo divino"  259. El quinto peldaño simboliza la energía básica de la existencia que es el fundamento de todo lo que se conoce como "intuición", y por ello aquí ha recibido el nombre de "energía de la intuición". Como esta energía penetra todas las energías precedentes, y como todo lo que hay en la existencia está, precisamente, compuesto de estas energías, la facultad de penetración de la energía de la intuición no encuentra así ningún obstáculo. Por su naturaleza cósmica, esta energía se puede comparar a una especie de rayos que atraviesan directamente todas las cosas sin hacer ninguna excepción. Cuando el individuo llega al punto de haber desarrollado los órganos de los sentidos, por medio de los cuales puede percibir por medio de dichos rayos o energía, ve sin ningún tipo de impedimento a través de todos los misterios. Aparte de la Divinidad, las realidades eternas y las leyes del universo, que pronto se transforman para él en experiencias propias y reales, ve además paulatinamente zonas de mundos desconocidos, sistemas de planetas y formas de existencia que pasan a ser detalles fundamentales de su experimentación diaria de la vida, al mismo tiempo que, en virtud de este supremo conocimiento que posee, ahora también es un factor esencial en la creación de ideas para una nuevas culturas mundiales, nuevas vías evolutivas y nuevos métodos de creación. Un talento de percepción semejante aparece aquí, en "Livets Bog", con el nombre de "conciencia cósmica". Con una conciencia de este tipo, el ser vivo ve la existencia en su manifestación más elevada, y su conocimiento es divino, dado que sólo puede expresarse con el concepto "todo es muy bueno". Pero ver la existencia de esta manera es lo mismo que verla desde "el punto de vista propio de la Divinidad". Experimentar la existencia con conciencia cósmica es, por consiguiente, lo mismo que vivir directamente con la Divinidad. Y como esto constituye, de este modo, el factor de conciencia esencial de la zona en que culmina la energía de la intuición, a dicha zona o reino se le ha dado el nombre de "el mundo divino".


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