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El investigador se aleja de la esfera material. La ciencia terrena como un medio al servicio de la moral oscura. La conciencia del hombre terreno como la sede del despliegue de la genialidad de la conciencia animal. La causa del predicado "hombre". La genialidad animal tiene que ser experimentada hasta el final antes de que la transformación de animal en hombre acelere  231. La investigación científica no puede quedarse en la esfera material para nadie en absoluto. Esto no significa, naturalmente, que la esfera material tenga una frontera, y que el individuo pueda llegar con su investigación a esta frontera, al contrario, la esfera física no tiene ninguna frontera en su propia zona. Esta esfera es en dicha zona, igual que las otras esferas de existencia en su zona particular, infinita, lo cual quiere decir que pueden seguir manifestando eternamente nuevos detalles, especialmente porque se encuentran en una transformación constante. En menos de una fracción de segundo se crean millones de nuevos detalles. De este modo el investigador no podría jamás terminar con la investigación física si algo totalmente distinto no estuviese en vigor. Dado que la investigación física, tal como ya sabemos, existe a base de excesiva inteligencia con respecto al sentimiento, lo cual significa a su vez que existe a base de que la energía del peso y de la inteligencia están enlazadas con un sentimiento primitivo, esto significa, por su parte, que la ciencia física existe basándose en la falta de una armonía consumada o totalmente desarrollada en la conciencia del individuo. Esta conciencia mostrará, por consiguiente, una correspondiente falta de armonía que, entre otras cosas, se plasma en el hecho de que la ciencia física es "fría", es decir, insensible. Debido a que la facultad de sentimiento del individuo es primitiva, éste no puede percibir o comprender en ningún grado considerable detalles de la energía del sentimiento y, de este modo, no puede adquirir conocimientos sobre los detalles de la esfera del sentimiento. Por esto, su conocimiento se transforma en parcial, materialista e insensible. Es útil al servicio de la moral oscura y del principio mortífero para crear utensilios que produzcan muerte y mutilación. Se usa para la guerra, la toma del poder, etc. La ciencia material manifiesta, pues, en gran medida el estadio en que la conciencia animal se encuentra en su punto de mayor genialidad. Todas las tendencias animales no alcanzan su más alto despliegue o florecimiento en los seres que comúnmente llamamos "animales", sino al contrario en el hombre terreno. Pero esto es muy natural. Lo primero que necesariamente tenía que pasar con el animal cuando comenzó a ser receptivo para energía espiritual superior, lo cual en este caso quiere decir para "la energía de la inteligencia", era naturalmente que tenía que usar dicha energía superior para la satisfacción de sus deseos animales o al servicio de su conciencia diurna animal. En virtud de esta elevada energía espiritual se transformó muy pronto en altamente superior a los otros animales, es decir, en superior a aquellos que todavía no podían recibir esta energía. Esta superioridad consiste, por consiguiente, en poder practicar un despliegue mayor de las tendencias animales o del principio "matar" y, de este modo, le da a su origen el predicado "hombre". El hecho de que dicho origen haya recibido este predicado viene de que su superioridad se debe a "la energía de la inteligencia", y esta energía es, precisamente, sinónimo de energía humana o espiritual superior. Pero como el ser en cuestión todavía se encuentra muy lejos de estar en armonía con las esferas de existencia en que las energías espirituales tienen su sede, aún constituye un feto del auténtico o verdadero hombre, y aquí reconocemos el estadio del ser al que pertenece el hombre terreno. Pero para que el animal pueda transformarse en un hombre verdadero, las tendencias animales tenían que ser llevadas a su punto más alto, tenían que ser llevadas a la genialidad, tenían que ser experimentadas hasta el final por el propio ser. Sólo después de esta culminación la transformación o cambio del animal en hombre acelera.


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