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| Se elimina la causa principal de los infanticidios, los partos clandestinos y los abortos | 116. Como el estado mundial también costea temporalmente el mantenimiento de cada niño, los hijos no son ninguna carga económica para los padres. Pero como el estado mundial reembolsa de nuevo el mantenimiento del niño, por medio de pequeñas cuotas inapreciables de los recibos de trabajo del individuo, cuando éste ha llegado a la edad en que tiene la obligación de trabajar y, tal como hemos dicho anteriormente, garantiza que la economía del estado mundial no se reduzca de ningún modo a causa de la encarnación en la Tierra de nuevas almas, la causa principal de los peligrosos y macabros infanticidios, los partos clandestinos, los abortos, etc., que en gran manera tienen lugar actualmente y que amenazan la existencia de toda la humanidad terrena, desaparecerá del mundo. Cada nacimiento de un nuevo ciudadanito mundial no puede llegar a ser nunca, en ninguna situación, una fuente de dolor y desesperación para un padre y una madre debido a la economía, sino que al contrario será saludado con alegría por todo el estado mundial como semejante al cumplimiento del mandato divino: "Sed fecundos y multiplicaos y henchid la tierra y sometedla". |
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